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II CERTAMEN GENARIANO DE VERSOS BURLESCOS
A continuación se presenta un especial de todo lo relacionado con la convocatoria
del segundo certamen celebrado en 2012.

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GÉNESIS
Por "Casis O´bria" (Madrid)

En esta España devota,
en que cada procesión
desfila sin dar la nota,
existe una variación
desde fecha bien remota
en la ciudad de León.

Quizá no guste a la Rota,
ni al clero, ni al beatón,
pero alta tiene la cota
pues se bebe de porrón
a morrete, en vaso o bota
vino, orujo, y hasta ron.

No ha lugar a la cordura.
ni a tristezas, ni recato,
pues es noche de locura,
y de pasar un buen rato,
recordando la andadura
de un hombre cuyo retrato
nos quita toda amargura:

Tratante en pieles de liebre,
que le daban por las casas,
fue Genaro un hombre alegre
y dulce como las pasas.

Adicto al orujo, el vino,
los naipes y lupanares,
marchaba por buen camino,
entre el orujo y los bares
la noche del jueves Santo,
cuando un camión de basura,
conducido sin mesura,
lo dejó tieso cual canto.

Moncha, hetaira del lugar
al pasar por la muralla,
tras dejar su lupanar,
descubrió la acción canalla
y auxilio quiso prestar,
pero el daño era de talla
y no le pudo salvar.

Enterados los amigos,
se personaron atentos
mas sólo fueron testigos
de sus últimos alientos.

Los cuatro de más valía,
buscando algo de consuelo
para tan grande agonía,
decidieron que aquel suelo,
sobre el que inerte yacía,
sería broche de un duelo
de orujo y algarabía
que, atentos al calendario,
harían, en cofradía,
llegado su aniversario.

Así, con muy buen criterio,
se erigieron en cronistas
con tan sabio ministerio
que fueron evangelistas.

Esquivaron todo “risco”,
sin embargo es de rigor
señalar que don Francisco,
el cronista fundador,
a críticos hizo cisco
pues, de poemas autor,
a pesar de ser menudo
era tan buen trovador
que al censor volvía mudo
con agudeza y honor.

Ameno y dicharachero
tenía tanto valor
que pudo ser buen torero
más fue mejor narrador.
Su nombre aquí doy entero:
el genial “toreador”
se llamó Pérez Herrero,
de profesión, un artista:
tallista de gran finura,
fue mecánico dentista
con mucha magistratura.

Aquel León sin “dueños”,
por el que vagó Genaro
en brumas de orujo y sueños,
por culpa de algún avaro
anda envuelto en pesadilla
pues no ha salido barato
pagar alguna estatuilla
que colocó un mentecato
con gestión de pacotilla.

Vigilando con esmero
no perder la buena milla,
que le da tanto dinero,
por el puro pilla, pilla
ha hecho un estercolero,
donde pueden verse moscas,
incluso en el mes de enero,
y también figuras toscas,
con algún que otro letrero,
un unicornio, entre roscas,
y pedruscos de cantero.

¡Ay León!, que ayer glosara
ese fundador certero,
que con tenazas y pluma
creaba versos y dientes,
todos de técnica suma,
para amigos y clientes
¡Huérfano quedaste al fin!,
sin el padre Genarín
“regando” esos monumentos,
y sin tu poeta afín
criticando emolumentos.

Hoy, fecha de aniversario
de un émulo de tenorio,
cuyo fin extraordinario
goza de gran auditorio,
olvidemos esos “cardos”,
que, por baja calidad,
afean nuestra ciudad:
y hagamos noche de embrujo,
de buen humor y de bardos,
bebiendo a modo el orujo.



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COFRADÍA DE NUESTRO PADRE GENARÍN